Nuestros amigos Sergi y Susanna nos invitaron a su vendimia de este año. Ellos son de Nulles, una linda población del Alt Camp catalán.
Fue una experiencia extraordinaria. Es el encuentro anual entre familiares y amigos en torno a esta fruta dionisíaca. Fue un verdadero honor de participar en él.
Otra parte termina en la producción local de Nulles bajo el nombre de Adernats y el resto en la producción DOC del Alt Camp tarraconiense.
El trabajo de la vendimia es intenso. Empieza temprano en la mañana y se mantiene durante varios días. Los racimos se recolectan a mano, cortando con un alicate a nivel de la base.
Se van colocando los frutos recolectados en baldes ( en ciertas vendimias, la recolección se hace en cajas de madera, para evitar que las uvas se golpeen y no comience el proceso de oxidación antes de tiempo).
Vendimiar es una experiencia extraordinaria. Es un acto que se ha repetido por centenares de años, prácticamente inalterado. El tiempo se detiene para que uno viva una experiencia colectiva que tiene su propio ritmo, pausado pero constante. Una convivencia que nos pone en contacto con el ciclo de la vegetación, con el nacer y morir, con la eterna circularidad.
A nuestros amigos Susanna y Sergi así como a sus amigos y familiares recolectores…Moltes grácies!
De nada, fue un placer compartir con vosotros lo que es para nosotros la recolección de éste fruto tan preciado. Yo también pienso que vendimiar es una experiencia extraordinaria que los que la realizamos cada año, ya por rutina no sabemos apreciar del todo.
Moltes gràcies per tot!!!
Un reportatge magnífic!
Moltes felicitats!!!!