
Para los catalanes (autóctonos y rencauchados) el día de Sant Jordi, el santo patrono de Catalunya, se celebra de un modo muy especial: se hace una gran fiesta en los espacios públicos que gira en torno al libro.
Las calles se llenan de tarantines de libros y rosas rojas. Las librerías de la ciudad ofrecen sus libros con descuentos del 10% . Las principales editoriales en conjunción con los libreros cuentan como invitados con autores de renombre que firman sus libros a los compradores.

Entrando en la recién inaugurada librería Bertrand- todo un emporio para los bibliófilos o biblió…fagos? (visto que es un blog de cocina..)- nos encontramos una larga mesa con unos 8 autores . Los primeros 7 esperaban pacientemente la llegada de algún lector en busqueda de dedicatoria. El último tenía literalmente monopolizada la cola: se trataba de …
QUINO!!!!!

Me dió una emoción enorme: se me aparecieron repentinamente en la mente todo un espectro de personajes arquetipales pertenecientes a mi mas tierna infancia: Susanita, Guille, Felipito, Manolito; «Lechiguita, Libertad», las sopofobias ,….
Eso sí: soy de la era gráfica. No puedo soportar mis tiras cómicas con voces impuestas por nadie. Sólo me sirven las mías, la que me inventé con cada lectura.
Me compré «La aventura de comer» , la cual esta en estos momentos sentada en mi escritorio con una flamante dedicatoria.
Me despedí de Quino pidiendole un último deseo: que me dejara estampillarle un sonoro beso en el cachete!
