El sobrino sueco Esaias, siguiendo los pasos de su abuela Marucha, que luego fueron seguidos por los de su tio Leo, ya se mete en la cocina, libro en mano, a cocinar para la familia.
Su cordero horneado marinado en abundante aceite de oliva, ajo, romero y sal tal como rezaba su recetario libanés y servido con arroz basmati paquistaní, quedo sensacional…
Småklig måltid! (Buen Provecho)
Bravo Esaias!