Fui a viisitar Eataly de Roma. Conocía el de Torino y , habiendo quedado gratamente impresionada, decidí ir a ver esta nueva sucursal (otra es la de NYC)
El lugar es impresionantemente grande (4 pisos) , el decorado estilo nave industrial. Esta repleto de gente. Hay «estaciones» de quesos, carnes, embutidos, pizzas, frituras, libros,…y para de contar.
Y sin embargo..
A los que leen mi blog les consta que no me gusta poner comentarios negativos. Prefiero no poner nada. Pero en vista que hice el esfuerzo de ir hasta Eataly Roma y, una vez superado el «destello» inicial, diré que salí con un mal sabor del lugar.
Las paredes están llenas de lugares comunes sobre la comida sana, el trillado 0 Km, el deber ser ecológico, la defensa al pequeño productor…
Es uno de los lugares mas caros en los que he estado en mucho tiempo. La mozzarella de bufala ( que se produce a 30 km ) llega a costar 8 euros; el chinotto ( en una botella que no pasa de 150 cc: 3,5 euros). Y así sucesivamente.
Han mezclado el producto artesanal con las máquinas nespresso, los libros de cocina con los de autoayuda….
El servicio es bastante malo.
Sentí que el noble discurso original del Slowfood se extravió por el camino y que lo único que queda es una explotación de lugares comunes para cobrar precios absurdos.